(Nombre egipcio "Impu", nombre griego "Anubis").
Su toque era suave (solamente con tocar a alguien suavemente, moría), como el de su hermano gemelo Hipnos (el sueño).
Los dos vivían en una cueva oscura donde el sol nunca brillaba, tenían ahí un palacio subterráneo cercano al Nix.
A su entrada crecían amapolas y otras plantas hipnóticas.
Y a través de ella fluía Lete, el río del olvido.
La muerte violenta era el dominio de las hermanas de Thanatos, las Keres, espíritus de matanza y enfermedad.
Caracterizado por su eterna e intensa oscuridad, se le representaba como un joven alado y era considerado hijo de Nix (la diosa de la noche), y Érebo (Dios de las tinieblas).
Su toque era suave (solamente con tocar a alguien suavemente, moría), como el de su hermano gemelo Hipnos (el sueño).
Los dos vivían en una cueva oscura donde el sol nunca brillaba, tenían ahí un palacio subterráneo cercano al Nix.
A su entrada crecían amapolas y otras plantas hipnóticas.
Y a través de ella fluía Lete, el río del olvido.
La muerte violenta era el dominio de las hermanas de Thanatos, las Keres, espíritus de matanza y enfermedad.
Caracterizado por su eterna e intensa oscuridad, se le representaba como un joven alado y era considerado hijo de Nix (la diosa de la noche), y Érebo (Dios de las tinieblas).
En el arte, también era representado
como un hombre joven con barba, llevando una mariposa, una corona o una antorcha
invertida en sus manos (o una tea encendida en la mano que se le apaga o se le
cae).
A veces tiene dos alas y una espada sujeta a su cinturón.
Psicoanálisis:
También tiene un papel destacado en el psicoanálisis de Sigmund Freud.
Freud estableció dos tipos de pulsiones:
Eros y Thanatos.
El primero el de la vida, el segundo el de la muerte.
El segundo (Thanatos), representa un movimiento agresivo, que en ocasiones se resuelve en una energía que nos induce a volver a un estado de calma.
Las pulsiones de muerte se dirigen primeramente hacia el interior y tienden a la autodestrucción, secundariamente se dirigirán hacia el exterior, manifestándose entonces en forma de pulsión agresiva o destructiva.
También tiene un papel destacado en el psicoanálisis de Sigmund Freud.
Freud estableció dos tipos de pulsiones:
Eros y Thanatos.
El primero el de la vida, el segundo el de la muerte.
El segundo (Thanatos), representa un movimiento agresivo, que en ocasiones se resuelve en una energía que nos induce a volver a un estado de calma.
Las pulsiones de muerte se dirigen primeramente hacia el interior y tienden a la autodestrucción, secundariamente se dirigirán hacia el exterior, manifestándose entonces en forma de pulsión agresiva o destructiva.
Thanatos actuaba cumpliendo el destino que Las Moiras dictaban para cada mortal.
Si bien se las reconoce como hijas de Zeus y Temis, muchos autores afirman que son hijas de Nix, lo que indicaba la oscuridad del destino humano.
Si bien se las reconoce como hijas de Zeus y Temis, muchos autores afirman que son hijas de Nix, lo que indicaba la oscuridad del destino humano.
La más joven, Cloto, preside el momento del nacimiento y lleva el
ovillo de lana con el que va hilando el destino del nadio.
La segunda, Láquesis,
enrolla el hilo en un carrete y decide la duración de la vida de cada persona, mientras que la anciana Átropos (lo que no se puede evitar), corta el hilo con sus tijeras de oro,
terminando con la vida de cada mortal.
En la imagen, Hipnos y Thanatos, los demonios del sueño y de la muerte, tienen bajo su protección un cuerpo.
(En el templo de Asclepios en Pérgamo se pueden contemplar las bóvedas a través de las cuales se procedería a las curaciones durante el sueño inducido. Hipnos y Thanatos tomarían bajo su protección a los enfermos).
Thanatos era el genio alado que acudía a buscar los cuerpos de los que
habían fallecido.
Cortaba un mechón de sus cabellos para ofrecer como tributo
a Hades y se llevaba sus cuerpos al mundo de los muertos.
A su alrededor aparece revoloteando una mariposa como símbolo de la vida futura.
Es representado en formas agradables para no despertar malestar entre los contempladores de la obra de arte que lo representa.
Una de las formas más dulces mediante las que se le representó, fue como una rosa sobre un féretro.
A su alrededor aparece revoloteando una mariposa como símbolo de la vida futura.
Es representado en formas agradables para no despertar malestar entre los contempladores de la obra de arte que lo representa.
Una de las formas más dulces mediante las que se le representó, fue como una rosa sobre un féretro.